Las personas cercanas saben que, a finales del año pasado, fui aceptado en un programa de doctorado en Informática en la Universidad Federal de Rio de Janeiro. Lo interesante del asunto es que, aunque es en informática, la línea específica en la que me inscribí es la de Análisis de Sistemas Complejos. ¿Por qué esta línea? Porque una red social (humana, no su representación o una plataforma específica) es una forma de sistema complejo.
La oportunidad de inscribirme en el programa apareció en un momento en el que sentía que estaba llegando a un límite en cuanto al uso que puedo hacer de la teoría de redes sociales en mi práctica. La exploración que he realizado en los últimos años en la construcción de ambientes de aprendizaje que reflejan teorías de aprendizaje en red me muestran que necesito aprender nuevos elementos que me ayuden a comprender cómo ocurren los fenómenos de interacción en las redes sociales que se generan dentro de los procesos de aprendizaje. Por esa razón se vuelve útil disponer de un espacio para entrenar mis ojos para ver cosas que no pueden ver aún. Eso es fabuloso, pues ahora tengo un área y una pregunta de interés más clara.
Hace cinco años tuve la oportunidad de ingresar a un programa doctoral pero decidí no hacerlo porque, si iba a dedicar a algo varios años de mi vida, era imperativo que estuviera convencido de ello. No me interesaba mucho ingresar a un programa porque mi institución educativa (la Universidad de los Andes) me lo exigía como requisito, y menos hacerlo para terminar en una especie de pregrado extendido, trabajando en el ‘sueño’ de otro investigador. Aunque suena poco académico, quería identificar mi propio ‘sueño’ (o al menos sentirme genuinamente interesado en lo que fuera que estuviera haciendo… En todo caso, esa decisión me llevó por un camino lleno de muchas sorpresas y aprendizaje). Así que en esta ocasión mi interés por un programa de doctorado se debe al trabajo que he venido realizando en los últimos años, por lo que está completamente articulado. No es algo diferente, sino que me permite profundizar y avanzar en mis comprensiones actuales. Tengo una necesidad y un interés claro por aprender cosas específicas.
Hay un detalle, en todo caso, y es que estoy asumiendo este proceso de manera muy tranquila. Esté o no en un programa de doctorado, no voy a dejar de aprender, así que si en algún momento siento que mi camino es otro, sencillamente lo seguiré. Para lo último que quiero un doctorado es para “lavar” mi experiencia y tener un ‘cartón’ que me acredita como ‘doctor’. Tal cosa sería absolutamente inconsecuente con mis convencimientos respecto al cambio progresivo que nuestros sistemas están (y estarán) experimentando.
Como parte del proceso, tuve que escribir una propuesta inicial de investigación, que delimitara de alguna manera mis intereses. Así que aquí está. Hay una versión de ese mismo documento en portugués, para quien prefiera ese idioma:
Esto significa que tendré que profundizar en un montón de temas que sólo he abordado superficialmente hasta ahora, pero que espero sean un aporte realmente útil para mi área. En la revisión que he hecho hasta ahora, al menos, no hay todavía tanto trabajo en esta área (al menos trabajo que cualquier docente pueda aprovechar en su práctica), por lo cual encuentro muy estimulante explorarla un poco más.
Como de costumbre, comentarios, recomendaciones y sugerencia son muy bien recibidos!