Hace un par de años, Dove lanzó su campaña de "curvas reales", en la cual enfilaba baterías contra los modelos e imágenes de belleza prefabricadas, que no tenían que ve con la realidad, y que estaban (y están todavía) deformando de manera importante nuestras percepciones respecto a lo que es bello y a lo que quisiéramos llegar a ser.

En esa línea, Dove produjo un comercial que muestra lo que un buen editor de imágenes puede lograr. Pero Dove no contaba con lo que la cultura popular podía generar a partir de sus ideas...